…En mi caso particular, Crear en Conjunto, surge del proceso de búsqueda que cada proyecto conlleva y consecuentemente, me aporta un Desasosiego Creativo muy productivo. Trabajar con otros y para otros es extremadamente enriquecedor y una acción altamente política. Hay que saber ceder sin perder la identidad, pactar, buscar consensos, interpretar intenciones, llamar la atención a opciones menos eficaces, estar abierto a cambios de rumbo y viabilizar lo mejor para un fin común. Para ello, la Investigación Experimental es fundamental porque me permite ir más allá de la propia experiencia, mirar las cosas del revés, acercarme a lo íntimo olvidando la convención, dialogar con el lugar, revalorizar el cotidiano, eliminar la perspectiva unidimensional y transitar por los universos de los clientes dónde aparece lo extraño, la sorpresa y lo ajeno.
Para cada proyecto creo contextos humanos de trabajo bastante heterogéneos. Invito a compañeros de diferentes ámbitos a trabajar conmigo. Cada proyecto es único y cada equipo también. Somos un Archipiélago donde la diferencia es lo que nos une y nos complementa, y a través de diferentes visiones logramos poner de manifiesto diferentes espacios, tiempos y habitares invisibles. Os presento algunas de las “islas de mi archipiélago” profesional:
Miguel Ornelas, la Isla de la Tenacidad
> Arquitecto mexicano, residente hace más de 10 años en España. Al igual que Barragán, domina el color y las marcas punteras del interiorismo. Nunca se olvida del binomio calidad/ precio y siempre encuentra el detalle adecuado a cada espacio.
Cláudia Vasconcelos, la Isla de la Resiliencia
> Arquitecta portuguesa, residente en Lisboa, y con una amplia experiencia de estudio y de obra. Su know how nos saca de apuros constantes, cuando la tecnología nos supera. Experta en transformar tranquilamente lo ideal en realidad.
Roberta Scamuzzi, la Isla de la Bravura
> Arquitecta y escenógrafa italiana, natural de Turín. Su experiencia escénica es enorme y siempre está receptiva a un nuevo desafío. La pequeña escala le atrapa, se sumerge en cada pormenor y arquitectónicamente vuela desde el figurinismo a la escenografía sin dudar.
María Escobar, la Isla de la In.quietud
> Actriz, performer y pedagoga española, residente en Madrid. Cuestiona el cuerpo en el espacio y los espacios del cuerpo, siendo el cuerpo, el movimiento y el gesto su gran herramienta de trabajo. Con ella descubrí la poesía de la arquitectura corporal y como ésta es clave a la hora de diseñar ambientes o situaciones. Mueve lo inmovible.
Sonia Lago, la Isla de la Cordura
> No le gustan las etiquetas. Es gallega y respira Arte. Deambula constantemente por su universo Onírico y en esas derivas trae a la realidad narrativas de relaciones espacio-temporales [casi siempre] improbables. Con su presencia activa muchos de los objetos que creo y les da un sentido que va mucho más allá de la propia forma o uso.
Trabajar en colectivo es una constelación temporal que abre una potencialidad para la proximidad, entre todos y conmigo misma. Algo que aparece como un espacio de vecindad, desafiándonos los unos a los otros a través de muchas situaciones que se encuentran en la ruptura entre lo que no ha sucedido y algo que aún está por suceder. Sin mis compañeros voy hacia una zona de comodidad apática, de posible inmovilidad mental, de equilibrio interior ficcional y de silencio que no ocupa espacio, pero por veces ensordece. Con ellos, viajo, me pierdo, me encuentro y me afecto. Con este desplazamiento hay un rechazo de mi pasividad y me abro a una transformación más amplia y profunda de mi trabajo. Experimento el Nosotros en cada proyecto u objeto presentado. Al trabajar en red, se plantea muchas veces la pregunta ¿Quién es el autor? Porque lo hemos creado entre todos. La diversidad, la aparente contradicción, el cambio de rol, la cooperación, la diferencia es una manera de seguir con la búsqueda que cada proceso me exige. Todos los proyectos son viajes sin rumbo predefinido, son estímulos que nacen de la interacción del cliente conmigo y de mi con mi equipo de trabajo, acabando por crear una inestabilidad productiva, que me conduce a una situación de fragilidad creativa. En este viaje invito al cliente a sumarse, a participar, a acercarse, a intervenir, a relacionarse con cada propuesta presentada, activándola de alguna manera: determinada o indeterminada. Marcando claramente un antes y después en cada encuentro hasta a la propuesta final